Revisión del presupuesto familiar
Cuando nazca tú bebe, tu realidad financiera cambiará drásticamente. Ahora más que nunca es muy importante que realices un presupuesto, y sobre todo mantenerlo y quedarte dentro del mismo. Ahora que tienes a alguien que depende de ti, necesitas mantener los asuntos financieros de la familia en orden. Un presupuesto bien pensado será tu herramienta de mayor valor para manejar el dinero de la familia.
Si ya tienes un presupuesto, solo necesitarás ajustarlo para que cumpla con las necesidades de tu nueva familia. Olvídate de la opción de vivir al día y corregir errores sobre la marcha, apretándote más el cinturón al final de mes si te hiciera falta. Deben controlar su situación financiera porque ahora hay alguien más que depende de ustedes.
No te deshagas de tu presupuesto viejo; puedes usarlo como un punto de partida para un presupuesto nuevo. Revisa todos los gastos para ver si cambiarán con tu nuevo bebé. Por ejemplo: tu alquiler de vivienda probablemente permanecerá igual; pero las facturas eléctricas tal vez aumente si una persona está planificando quedarse en casa todos los días, al igual que el rubro alimentación. Te damos algunos de los aspectos que pueden cambiar en tu presupuesto.
- Gastos del Hogar: ¿Hará falta alquilar una casa más grande?, incluso si se quedan en la misma casa los gastos de servicios públicos, limpieza, entre otros van a aumentar. Hay que acondicionar y amueblar la habitación de tu hijo, cuyos gustos y necesidades cambiarán con el tiempo.
- Alimentación: Tendrá que pagar más en comida; tu gastos en el supermercado serán mucho mayores, ahora tendrás que comprar la leche, comida de bebe, toallitas húmedas, etc.
- Ropa: ¡Pañales si y muchos! Ropa, calcetines, pantalones, vestidos, trajes, etc. Aunque sean tan pequeñitos, los gastos son grandes.
- Gastos médicos: Todos aquellos gastos que no cubre el seguro, desde medicina para el dolor de cólico hasta medicamentos por alguna gripe; ten presente que el valor que pagabas por el seguro aumentará un poco.
- Maternales o niñera: Cuando sea el momento en que vas a regresar a tu trabajo, tienes que saber ya quien cuidará a tu bebe y cuál será la cantidad que tendrás que pagar al mes; así lo presupuestas.
Como padres que son o que serán, debes de sustituir la cultura de consumo por una cultura de ahorro. Parece una paradoja a la vista de todos los gastos nuevos, pero ahora es más importante que nunca que tengas un fondo de emergencia para cubrir imprevistos y destinar parte de los ingresos mensuales al ahorro e inversión para lograr objetivos financieros a largo plazo.
Trata de tener cuidado con las compras impulsivas y las deudas. Hay una industria enorme dedicada a productos y servicios carísimos para bebes y niños, y como padres, te puedes sentir presionado a “darles lo mejor”, incluso las personas ahorradoras y racionales pueden sentir el deseo de comprarles las cosas más caras, con solo contemplar a sus hijos. Todos quieren lo mejor para ellos, pero sin un poco de cuidado y autocontrol es muy fácil que te metas a un espiral de consumo y endeudamiento que no hace más que comprometer las oportunidades futuras de tus hijos.
Hazte la idea, tu vida y tu presupuesto cambiaran, ya no son los que eran antes de tener familia, ahora serán 3. ¡Bienvenido al maravilloso mundo de padres!
